“Evolución“ viene del latín “evolvere” , sacar, desenrollar. Se entiende el despliegue de cosas preexistentes, por tanto, no de una aparición nueva real. Antes de la manifestación de la enseñanza genealógica de Darwin (y a menudo también después) se utilizaba este concepto para un desarrollo individual. Como consecuencia de las marchas triunfales de la enseñanza genealógica, se utilizó el término “evolución” más y más para la historia geneló gica. En este nuevo contexto ya no posee el significado original. Ya que la evolución de la historia genealógica no significa la expresión de algo preexistente, sino (a largo plazo) la aparición de algo totalmente nuevo. Un té rmino realmente apropiado para este proceso todavía hipotético de una historia genelógica desde un organismo unicecular hasta las formas de vida actuales, notablemente no existe.
Distinguiremos en otro contexto entre microevolución y macroevolución. En el sentido de expresión de algo preexistente, se puede usar acertadamente el término “evolución”en el marco del Biología de los tipos básicos. Ya que allí se parte de la base, que se ha dado un potencial de variación a los tipos básicos, del cual por selección a través de distintas condiciones ambientales se pueden seguir distintas direcciones de especialización. En este proceso se “agota ” (“desenrolla”, evoluciona) la capacidad de expresión ya presente en el genoma (genes) existente en el tipo básico. Esta comprensión de “evolución” (acá también mencionada como microevolución) incluye si, lí mites de la capacidad de cambio (sólo se puede agotar lo que ya existe). Por ello que (micro-)evolución significa en los tipos básicos, algo básicamente distinto a las modificacio nes que debieran haberse dado en los oganismos vivos en el marco de una evolución general. Una presentación más específica a esta problemática la encuentra en el párrafo Micro- y macroevolución. |
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